Este miércoles Costa Rica se convirtió en el primer país de América Latina en reanudar su liga de fútbol.

En el país centroamericano se realizaron los dos primeros partidos de los seis que completan la fecha 16 del Torneo de Clausura. Los clubes jugaron a puerta cerrada, bajo estrictas medidas de seguridad para controlar la propagación del coronavirus.

El volante hondureño Alex López, quien jugó en uno de los partidos inaugurales, dijo que el hecho de haber retomado la liga demuestra que la lucha contra el coronavirus va por buen camino. “Es un día importante para Costa Rica, no solo en fútbol sino a nivel de salud, porque el hecho de que regrese el fútbol es porque el sistema de salud ha funcionado muy bien”, dijo el futbolista.

Aunque para algunos jugadores las nuevas normas hicieron que jugar fuera un poco incómodo, los equipos creyeron haber cumplido con todas las disposiciones.

Entre los protocolos que debieron cumplir los futbolistas estuvo jugar sin público. Además los técnicos y jugadores de banca debieron sentarse con el distanciamiento reglamentario entre sí, incluso algunos en graderías para cumplir con la norma. El uso de tapabocas también estuvo entre los requisitos. 

Además, quienes ingresaron al estadio debieron tomarse la temperatura debido a los protocolos instaurados por la Unión Nacional de Clubes de la Primera División (Unafut) y la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefutbol).

Los jugadores tampoco podían abrazarse ni escupir en la cancha. Los balones deben ser desinfectados antes de iniciar y después del medio tiempo. Con estas medidas, el Gobierno costarricense espera retomar gradualmente la normalidad, a pesar de que en la región se sigue viviendo el punto álgido de la pandemia.

El reinicio de la liga se dio mientras Costa Rica ve buenos resultados en sus estrategias contra el coronavirus. El país, que tiene cinco millones de habitantes, ha registrado 897 casos de COVID-19 y 10 decesos, para una tasa de letalidad de 1,2%.

anadolu

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