El grupo BMW (BMW, Mini, Rolls Royce) ha anunciado el cierre de sus factorías en Europa durante al menos cuatro semanas, hasta el 19 de abril debido al coronavirus.

«Muchos países han adoptado medidas muy decisivas que nosotros apoyamos como empresa. Tenemos que proteger lo mejor posible a nuestros trabajadores y a la empresa, y a la vez mantener nuestro margen de maniobra y prepararnos a los tiempos después del coronavirus», ha detallado Oliver Zipse, CEO del fabricante alemán, en una conferencia telemática de resultados. Las medidas afectarían a unos 130.000 empleados.

«Como muchos otros bienes, la demanda de automóviles bajara notablemente. Nosotros podemos adaptar nuestra producción de manera flexible a la demanda. A partir de hoy cerramos nuestras plantas en Europa y Sudafrica. El paro esta previsto por cuatro semanas, hasta el 19 de abril. Tenemos un amplio paquetes de medidas de flexibilidad y opciones de teletrabajo», detalló Zipse, que agradece a los trabajadores su ayuda «para superar esta situación».

Pese a la situación, el directivo ha querido lanzar un mensaje de «moderado optimismo». «Habrá un tiempo durante el coronavirus, y otro después del coronavirus. Somos fuertes y lucharemos contra él de manera conjunta», afirmó. También detalló que el grupo tiene previsto invertir 30.000 millones de euros en I+D en los próximos años «a pesar del coronavirus».

Por su parte, Nicolas Peter, director financiero del grupo, afirmó que los impactos a largo plazo «de momento no se pueden estimar». El directivo aseguró que su portfolio de modelo «joven y atractivo» permite a BMW estar preparados para 2020, lo que incluye «cumplir con los reglamentos en materia de CO2». No obstante, también constató que «antes del coronavirus creiamos que el resultado iba a aumentar. Ahora creemos que va a disminuir. Contamos con que las ventas a nivel mundial van a estar muy por debajo del año anterior».

En 2019 el grupo consiguió un beneficio neto atribuido de 4.915 millones de euros en 2019, lo que representa una disminución del 29,5% en comparación con los 6.974 millones de euros que ganó en 2018. La facturación del grupo, con sede en Munich, se situó en 104.210 millones, un 7,6% más, mientras que el beneficio operativo se redujo un 17%, hasta 7.411 millones. Entre las causas, el impacto de una provisión de 1.400 millones para hacer frente a una sanción por parte del a Comisión Europea por un supuesto cartel con Daimler y Volkswagen en relación con las tecnologías de reducción de emisiones de vehículos diésel y gasolina.

Para 2020 el grupo quiere redoblar su apuesta por la electrificación, partiendo de la base sólida lograda con modelos como el urbano i3 el recién lanzado Mini electric, «que ha logrado atraer a clientes que nunca antes habían conducido un Mini». El grupo ha empezado desde este año a comprar las materias primas de sus baterías, manufacturadas por Samsung y CATL, y quiere duplicar la autonomía de sus celdas.

«El cliente va a ser quién decida. Con los nuevos objetivos de CO2 el legislador cree que la demanda de electricos se incrementara un 40% hasta 2030», detalló Zipse, que insistió en que la concepción del grupo pasa por ofrecer modelos eléctricos pero también diésel y gasolina, a ser posible aprovechando las mismas cadenas de montaje. «No se puede dividir la industria en eléctrico y térmico. El i4 se ensamblará en Múnich, compartiendo taller de pintura o chapa con otros modelos térmicos. El IX3, ensamblado en China, se ofrecera como electrico, diesel, enchufable y eléctrico. El proximo serie 7 se ofrecera como gasolina, diesel, hibrido enchufable y 100% eléctrico», ennumeró.

En 2025 una tercera parte de las ventas en Europa de BMW serán electrificadas, y en 2030 la mitad. Hasta febrero las ventas de electricos habían crecido un 26%.

El grupo también continuará apostando por la tecnología de conducción autónoma, con el iNEXT, que llegará en 2021, y presumirá de nivel tres de conducción autónoma.

Además, el grupo es pionero en instalar en sus vehículos un software capaz de forzar el modo eléctrico (en los híbridos enchufables) cuando se adaptan en un área urbana. «Para comenzar hemos programado unas 80 ciudades: en Alemania, Países Bajos, Francia, Suiza. Y el software se puede instalar a posteriori».

Tambien tiene sentido para el grupo seguir aumentando la eficiencia de los motores de combustión. «Para muchos siguen siendo una solución, es una evidencia. Desde 2007 apostamos por Efficient Dynamics, y seguiremos. En el Serie 1 hemos podido reducir las emisiones un 15% respecto al modelo anterior. Hemos aumentado ademas la electrificación con sistemas híbridos suaves de 48 voltios en los motores de grandes volumenes. Supone 0,4 litros menos de consumo a los 100 y 9 gramos menos de CO2 a los cien kilómetros».

abc

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