La crisis del coronavirus no ha amainado. Y los mercados continúan en pánico con nuevas caídas. Tras más de dos semanas de pérdidas, esta comienza con el mismo nerviosismo y unas pérdidas más que notables empujadas también por la guerra del petróleo. El Nikkei de Tokio se ha desplomado este lunes un 5% y eso ha contagiado a las plazas europeas. Entre ellas, el Ibex ha abierto hundiéndose más de un 7%.

En el resto de mercados del viejo continente, las caídas en la apertura han ido en la misma línea. El Euro Stoxx ha arrancado con una pérdida de más del 8%, al igual que el DAX alemán y el FTSE británico. Así, los parqués siguen sufriendo con creces la alerta sanitaria por el coronavirus, con una expansión casi sin control por algunas zonas de Europa.

Además, acusan el recorte del 26% del precio del crudo, hasta el entorno de los 33,3 dólares, tras el choque entre Arabia Saudí y Rusia. De esta forma, la volatilidad que se vive en las Bolsas se ha apoderado también del mercado petrolero, con la cotización en caída libre.

Las repercusiones de las caídas en las Bolsas, así como la inestabilidad económica que ya amenaza el crecimiento de las principales economías del mundo, se han dejado sentir asimismo en la prima de riesgo española. En concreto, el diferencial con el bono alemán ha subido hasta los 109 puntos (casi un 20%), su nivel más alto desde abril del año pasado.

Por valores del Ibex, el más castigado es Repsol (presionado por el coronavirus y, sobre todo, por el recorte del precio del crudo), que pierde más de un 16%. Le sigue ArcelorMittal con un -14%. Ninguna de las 35 grandes del índice español ha conseguido sortear los números rojos de inicio y la que menos cae es Viscofan, que se deja más de un 3%.

Para esta semana, los inversores van a estar muy pendientes de lo que salga de la reunión del Banco Central Europeo (BCE), que se reúne este jueves. Su decisión se analizará con lupa, aunque el organismo está obligado a actuar tras el movimiento de la semana pasada de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos de bajar medio punto los tipos de interés. Pese a ello, el margen del BCE es muy estrecho y los analistas de Bolsa consideran que los vaivenes de los mercados continuarán hasta abril, cuando se presenten los resultados empresariales del primer trimestre con las pérdidas reales por el coronavirus.

En los parqués también se analizará con detalle todo lo que depare la crisis sanitaria. Sobre todo lo que pueda provocar la decisión del Gobierno de Italia de aislar amplias zonas del país donde viven 16 millones de personas. El efecto que tendrá la medida sobre la economía es una incógnita, aunque es de esperar que la actividad se resienta con creces.

Las Bolsas de Estados Unidos anticipan asimismo fuertes pérdidas para este lunes. En el caso del S&P 500 tiene limitado al 5% la caída que pueden registrar los futuros, un límite que las ventas masivas están forzando a que se alcance esta mañana. El hecho de no conocer el calibre del desplome en la principal referencia de los mercados del mundo solo agudiza el nerviosismo del resto de parqués.

elpais

Etiquetas: