Joe Biden es el hombre del momento en el campo demócrata, mientras que la carrera para llegar a las elecciones presidenciales de noviembre entra cada vez más en el vivo. El ex vicepresidente de la administración de Barack Obama obtuvo grandes resultados en las primarias celebradas en el Supermartes de esta semana y actualmente lidera el listado de los candidatos que han conquistado más delegados de cara a la convención de julio, donde se determinará quién va a ser el adversario del presidente, Donald Trump.
Gracias a esta prueba de fuerza, que le ha permitido superar a sus rivales demócratas en 10 de los 14 estados donde se votó, Biden ha conseguido dejar atrás a los demás candidatos que aspiraban a liderar el área más moderada del partido demócrata. Y así, ha reducido básicamente a una lucha entre dos con el senador por Vermont Bernie Sanders, considerado de posiciones más radicales, las futuras etapas de la campaña.
Sander, quien superó a Biden en las primeras tres citas electorales de los demócratas antes de cederle el testigo de ganador en las primarias de Carolina del Sur la semana pasada, está pendiente de conocer el resultado final de California, el premio gordo del Supermartes al ser el estado que más delegados otorga (415).
La última proyección de NBC News y Noticias Telemundo le da ventaja respecto a Biden, pero en total, hasta ahora el segundo ha sumado más delegados que el primero: 527 a 476, con 106 para otros candidatos (se requieren 1,991 para ganar la nominación).
Al neto de la actualización de estas cifras tanto en California como en otros estados donde el recuento todavía no es definitivo, aunque ya claro en indicar cómo se ha posicionado cada candidato (una situación que podría hacer aumentar para ambos el número de delegados a disposición), hay razones para creer que la montaña que tiene que escalar ahora Sanders para volver a supera a Biden es aún más alta de lo que pueden reflejar estas cifras, según NBC News. Estos son los tres motivos que sostienen esta idea:
1. Muchos de los delegados que Sanders sacó el martes son atribuibles a votos anticipados emitidos antes de que se votara en Carolina del Sur, donde ganó Biden, y de que algunos competidores moderados (Pete Buttigieg y Amy Klobuchar) del ex vicepresidente se bajaran de la carrera y anunciaran que lo respaldarían.
Los únicos estados que Sanders ganó el martes, además de Vermont, fueron California, Colorado y Utah, todos lugares donde los electores expresaron masivamente su voto de forma anticipada, antes de que Biden lograra una victoria en Carolina del Sur que le dio un buen empuje para el Supermartes.
A pesar de esos millones de votos, Sanders está en camino de terminar muy por detrás de Biden en el conteo de delegados del Súper Martes. Y no tendrá la misma ventaja atribuible a los votos anticipados en futuras etapas de la carrera demócrata. Incluso en Texas, donde Sanders sacó una ventaja sustancial de la votación anticipada, Biden fue tan dominante entre los votantes del Día de las Elecciones que se llevó el estado con 4 puntos de diferencias.
2. El resto del calendario de marzo favorece a Biden, no a Sanders. Los partidarios más importantes de Sanders hasta la fecha han sido los jóvenes y los latinos, dos grupos que están sobrerrepresentados en el suroeste. Pero California y Texas ya han votado, y Biden está listo para estirar su liderazgo en estados con más ancianos y más afroamericanos como Michigan, Missouri y Mississippi (10 de marzo), Florida e Illinois (17 de marzo) y Georgia (24 de marzo).
3. Los votantes demócratas podrían decidir no prolongar la contienda. En 2004, la última vez que candidatos del partido estuvieron compitiendo entre ellos para derrotar a un presidente republicano en el poder, John Kerry obtuvo una serie impresionante de victorias en febrero: los electores de las primarias decidieron respaldar mayoritariamente al favorito, terminando de facto la carrera con el supermartes. Este año, los demócratas podrían sentirse muy necesitados a cerrar filas para poder ganarles a Trump y así decidir unirse en torno a Biden.
Y justamente fue a esta unidad a lo que apeló el ex vicepresidente tras el Supermartes. "Vamos a reunir a todos los estadounidenses ... de todas las tendencias", dijo este miércoles en declaraciones a los periodistas en un hotel de West Hollywood., California. "Realmente quiero decir eso. Es lo que tenemos que hacer para ganar”, agregó
Sanders por su lado, atacó a Biden con la acusación de tener el respaldo del establishment del partido y con la crítica a su historial en temas como sus posiciones escépticas sobre el Seguro Social.
La próxima fecha clave es la de las primarias de Michigan, programadas para el martes de 10 marzo.
En el mismo día también se votará en Missouri y Mississippi, dos estados donde Biden debería tener grandes ventajas. Si Sanders no ganara tampoco en Michigan, donde sí lo hizo en 2016, sería difícil imaginar para él posibilidades concretas de superar al rival en esta campaña. Lo que necesita para eso es un nuevo fuerte temblor electoral que agite la carrera.
telemundo.com
Etiquetas: