El terremoto se originó al noreste de Japón, y afectó a la isla rusa de Hokkaido y a la parte norte de la isla de Honshu, la principal del país.
Según la Agencia Meteorológica de Japón, el epicentro del sismo se situó a 160 kilómetros de profundidad al sur de la isla Iturup.
Se descarta el tsunami y por el momento se desconocen los daños que ha causado.
Sin embargo, los temblores subterráneos se sintieron incluso en Tokio. En la escala japonesa de siete puntos, la fuerza de los temblores en la isla de Hokkaido alcanzó los 4 y, en la capital, solo un punto.
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