Muchas personas mueren diariamente alrededor del mundo por no lograr obtener a tiempo un trasplante que les salvaría la vida. No sólo los órganos como el corazón, los pulmones o los riñones pueden ser donados, sino también otras partes del cuerpo como los huesos, los ligamentos, entre otros. En vez de dejar el cuerpo descomponerse bajo tierra, es posible ayudar a otra persona al donar órganos y, de cierta manera, seguir viviendo después de morir.
2. Donar el cuerpo a la ciencia
Se puede ayudar a médicos futuros y doctores actuales a aprender más sobre el cuerpo humano al donar el cuerpo para una universidad o un hospital. Las facultades de medicina necesitan constantemente de nuevos cadáveres para enseñar a sus estudiantes todo lo que tienen que saber para convertirse en buenos profesionales.
3. Convertirse en un maniquí para ensayos de choque
Pese a que los maniquíes de pruebas de choque ayudan a entender muy bien lo que ocurre durante un accidente automovilístico, las simulaciones hechas con cuerpos reales producen resultados mucho más exactos. Para ayudar a la industria automovilística a volverse más segura, la Universidad Wayne State en el estado de Míchigan (EEUU) acepta donaciones de cadáveres para sus ensayos.
4. Participar de una exhibición en un museo
También es posible donar el cuerpo para museos y convertirlo en parte de una exhibición. Los responsables de la famosa exposición Body Worlds aceptan donaciones de cadáveres, los cuales son sometidos al proceso de plastinación y luego exhibidos en museos alrededor del mundo o donados a universidades. Además, es posible donar el cuerpo al Museo Maxwell de Antropología en la Universidad de Nuevo México para convertirlo en esqueleto de estudio.
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