El ministro de Salud Pública, Julio Mazzoleni, ha confirmado este miércoles ante los medios las sospechas que ya se venían barajando sobre la enfermedad del mandatario tras una inesperada cancelación de actividades.
El funcionario ha explicado que el presidente uruguayo se encuentra en “buen estado” de salud y cumplirá su agenda con algunas “pequeñas restricciones”.
Benítez, de 47 años, fue retirado de un acto público en Alto Paraná (350 kilómetros al este en la frontera con Brasil) y trasladado por vía aérea a su residencia de Asunción (capital) donde se sometió a chequeos y análisis de sangre que han terminado confirmando la presencia de dengue del serotipo 4, el “dominante” en el brote actual.
Los médicos han determinado que el jefe de Estado repose por 48 horas, pero “toda la agenda de la semana fue anulada”, ha explicado, a su vez, un portavoz del Gobierno.
El dengue se contagia por la picadura del mosquito aedes aegypty a través de cuatro serotipos, uno de los cuales (el serotipo 2) produce riesgo de vida.
La epidemia, que recrudeció con fuerza en enero, dejó hasta el momento dos fallecidos confirmados, en tanto otros 14 murieron bajo sospecha de la enfermedad, reveló a los medios el médico Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud.
Las autoridades paraguayas han reforzado en estas últimas semanas sus campañas informativas y de fumigación para combatir los mosquitos, principales transmisores de la enfermedad. El Gobierno recomienda acudir al médico en caso de síntomas como vómitos, dolor abdominal, sangrado y debilidad extrema.
HispanTV
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