La compañía Boston Dynamics ha diseñado robots capaces de subir escaleras y caminar por terrenos accidentados. Otras espectaculares máquinas, con aspecto de avestruz, están equipadas con sistemas neumáticos y ventosas para succionar cajas de cartón y moverlas de lugar. Los robots humanoides Atlas, son capaces de caminar, dar volteretas y saltar con una agilidad humana. Y esto es solo el comienzo: los enormes avances en inteligencia artificial y en robótica presagian que este tipo de máquinas cada vez serán más capaces y que estarán más presentes. Quizás llegarán a ser hermosas y a bailar.
Esta semana, un grupo de investigadores ha presentado un artículo en la revista « Physics of Fluids» donde han demostrado el funcionamiento de un sistema de succión, basado en un circuito de agua, que le permite a un robot trepar por una pared rugosa, coger objetos con esta textura o ayudar a una persona a escalar. Lo más relevante es que este dispositivo ha mostrado ser más eficiente en estas superficies que los sistemas de vacío basados en aire desarrollados hasta el momento.
«Nuestro diseño tiene muchas aplicaciones, pero creemos que el robot trepador será el más útil», ha dicho en un comunicado Xin Li, coautora del estudio junto a Kaige Shi, ambos investigadores en la Universidad de Zhejiang, en Hangzhou, China. «En comparación con otros robots trepadores, este (...) logra una sorprendente mejora en el rendimiento».
El problema de mantener el vacío
Tanto Li como Shi han creado un sistema que se basa en crear unidades de succión de vacío a partir del método de las «diferencias de presión cero» (ZPD, por sus siglas en inglés). Básicamente, este dispositivo cuenta con un circuito de agua que fluye a alta velocidad y que permite que unas ventosas generen el vacío, y no lo pierdan incluso sobre superficies rugosas.
¿Cómo funciona? Ese flujo de agua a alta velocidad crea una fuerza centrífuga que elimina las diferencias de presión que se forman en los límites de la zona de vacío, de forma que se impide que se rompa. Por ello, se mantiene una alta presión de vacío en el interior de las ventosas siempre y cuando se mantenga el flujo de agua.
Trepar o agarrar bloques
Estos científicos aseguran que las unidades de vacío que han creado son muy eficientes y que son más pequeñas y más ligeras que las tradicionales. De momento, las han puesto a prueba con un brazo robótico, capaz de agarrar bloques de hormigón, con un robot hexápodo capaz de trepar por superficies rugosas y en un dispositivo que puede ser usado por humanos para trepar.
A continuación, tratarán de lograr que el dispositivo succionador consuma menos agua, puesto que de momento es necesario tenerlo conectado a una fuente externa. «Si podemos reducir el consumo de agua, las unidades de succión funcionarán durante mucho tiempo con poca agua y el robot podrá cargar con su propio suministro en lugar de tener que estar conectado a uno», ha dicho Li.
abc