El gobierno interino en Bolivia, liderado por Jeanine Áñez, activó una orden contra el expresidente de su país, Evo Morales, para evitar su desplazamiento a territorio chileno desde Argentina, donde se encuentra asilado.

"He dado la orden para que Interpol active la orden de la aprehensión internacional”, sostuvo el ministro de Gobierno en Bolivia, Arturo Murillo.

El ministro detalló que el pedido internacional de captura de Evo Morales se da en medio de acusaciones contra el expresidente por la presunta comisión de los delitos de sedición y terrorismo.

"Lo estamos esperando, que venga, que no tenga miedo, lo vamos a cuidar, le vamos a dar protección, no le pasará nada, pero sí tiene que rendir cuentas en este país, eso es importante para nosotros", afirmó Murillo en una rueda de prensa.

Evo Morales planea viajar a Santiago, entre el próximo 23 y 25 de enero, para participar en el primer encuentro del Foro Latinoamericano de Derechos Humanos que es impulsado por la comisión de Derechos Humanos del Senado en Chile.

El encuentro contará con cerca de 50 expositores, entre los que se encuentran el expresidente boliviano y su actual abogado, el exjuez español Baltasar Garzón.

Luego de la renuncia de Evo Morales, el pasado 10 de noviembre, Jeanine Áñez se proclamó jefa de Estado de Bolivia en el Parlamento en una sesión sin quórum, al argumentar que así lo establece el orden constitucional.

El exmandatario renunció presionado por las fuerzas de Policía y el Ejército, luego de múltiples protestas y denuncias de fraude en las elecciones presidenciales del 20 de octubre, que ganó y le permitían mantenerse en el poder hasta 2025.

Morales, tras la renuncia, fue recibido en condición de asilado político en México, desde donde afirmó que su vida en Bolivia corría peligro, luego del que calificó como un golpe de Estado en su contra.

El expresidente se encuentra desde el pasado 12 de diciembre en Argentina, también en condición de asilado.

anadolu agencia

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