Sin un final a la vista, el transporte de trenes y metro nuevamente se vio gravemente interrumpido en París (capital) y en las líneas regionales.
Es el día 22 de huelga. Fue en 1995, cuando Francia experimentó una parálisis de esta magnitud. En aquel entonces, los huelguistas lograron derribar las reformas gubernamentales. Esta vez, aspiran a lo mismo.
Las conversaciones entre sindicatos y el Gobierno no lograron encontrar un terreno común la semana pasada, y se ha convocado un nuevo día de protestas masivas para el 9 de enero, dos días después de que se reanuden nueva ronda de negociaciones.
La reforma de pensiones del Gobierno prometía un sistema universal de pensiones para todos. Sin embargo, desde que se han iniciado las negociaciones, se han otorgado varias concesiones a ciertos oficios, como los que ejercen funciones soberanas.
Algunos policías y bomberos podrán retirarse a los 52 o 57 años de edad. Es lo mismo para los controladores de tránsito aéreo. Los camioneros mantendrán su licencia de fin de actividad bajo condiciones, con una salida anticipada a los 57 años.
Las movilizaciones que comenzaron el 5 de diciembre, afectan a las empresas, especialmente a los minoristas, hoteles y restaurantes, durante lo que debería ser uno de los períodos con mayor demanda turística del año. Si el 7 de enero, el Gobierno y los sindicatos no llegan a un pacto, los costos podrían ser mucho mayores.
HispanTV
Etiquetas: Francia