En un mensaje emitido el domingo en su cuenta en Twitter, el ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, arremetió contra el gobierno de facto de Bolivia por adherirse al Grupo de Lima para, según comunicó el mismo día la Cancillería boliviana, supuestamente lograr “una solución pacífica a la crisis en Venezuela”.

Arreaza rechaza el argumento de dicho gobierno, aduciendo que en Bolivia ahora gobierna una “dictadura fascista” que ocupó el poder por medio de “un golpe de Estado sangriento”.

Asimismo, pone en entredicho la naturaliza del Grupo de Lima, que alega defender la democracia en la región de América Latina, pero acepta a este tipo de gobiernos.

“Aquí se le ven todas las costuras al Grupo (cartel) de Lima”, sostuvo el jefe de la Diplomacia venezolana.

No obstante, la decisión de Bolivia, que muestra una ruptura con la política de 13 años de “hermandad” del presidente depuesto Evo Morales con su par venezolano Nicolás Maduro, fue bien acogida por la oposición del país caribeño que busca poner fin al chavismo.

El opositor venezolano Julio Borges afirmó que la medida “va a fortalecer la agenda de presión que sostiene la región contra Nicolás Maduro”.

El Grupo de Lima está integrado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía. Este grupo, con el apoyo de EE.UU., promueve la salida de Maduro de la Presidencia de Venezuela y respalda al autoproclamado “presidente encargado” de este país, el opositor Juan Guaidó.

Nada más instaurarse el gobierno de facto en Bolivia, la autoproclamada Jeanine Áñez rompió relaciones con Venezuela, expulsó a todos los diplomáticos venezolanos que representen al Gobierno de Maduro y reconoció al golpista Juan Guaidó.

HispanTV

Etiquetas: