Otro 38% de los encuestados piensa que Netanyahu podría retener su posición a pesar de ser acusado, y un 10% no se pronuncia sobre el tema por indecisión.

Sin embargo, cuando se hizo la pregunta a quienes se consideran votantes de derecha, el 57% respondió que Netanyahu debe continuar como primer ministro a pesar de las acusaciones.

El 34% de los votantes de fuerzas de derechas señaló que tiene que dimitir, mientras que el 9% dijo que no sabe si Netanyahu está en condiciones de seguir siendo primer ministro.

A la pregunta de a qué candidato votarían si se celebraran otras elecciones de inmediato, se reveló que el líder de la coalición de centro-derecha Azul y Blanco, Benny Gantz, superaría al partido Likud de Netanyahu con un escaño de la Knéset (Parlamento israelí), ganando 34 asientos frente a 33 del Likud.

La Lista Conjunta árabe sería el tercer partido más fuerte con 13 escaños, seguida de Israel Nuestro Hogar, del ultraderechista Avigdor Lieberman y los dos partidos ultraortodoxos, Shas y Judaísmo Unido de la Torá, con ocho asientos cada uno.

Las alianzas de izquierda Laboristas-Gesher y la Unión Democrática superarían el umbral electoral con cinco escaños.

El religioso sionista Hogar Judío y la extrema derecha kahanista Poder Judío no obtendrían representación en la Knéset.Sputnik

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