De acuerdo con algunos funcionarios familiarizados con el asunto y citados por el periódico Haaretz, la visita fue cancelada por "problemas logísticos". El equipo de Netanyahu avisó a los organizadores de su deseo de llegar a la cumbre con poca antelación.
Sin embargo, otros funcionarios ofrecieron una explicación diferente: es que la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, no respondieron a los intentos diplomáticos de organizar reuniones con Netanyahu al margen de la cumbre.
"Es una insolencia especial llegar inesperadamente a otro país de esta manera, especialmente para reunirse con un líder extranjero", cita el diario las palabras de un funcionario británico. El objetivo oficial de la visita declarado por el primer ministro israelí fue reunirse con el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo.
El líder israelí se enfrenta a acusaciones de soborno, fraude y abuso de confianza. No obstante, pretende permanecer como primer ministro del país a fin de aprovechar la oportunidad para anexionarse el territorio en disputa del Valle del Jordán con el apoyo de la administración de Estados Unidos, según su propia afirmación.
El 2 de diciembre, debatió la posibilidad de anexionar la zona en su conversación telefónica con el presidente de EEUU, Donald Trump, y como resultado de la conversación, declaró que el líder estadounidense no estaba en contra de la opción.
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