Netflix corregirá algunos elementos de su serie documental El nazi Iván el Terrible. Lo hará después de que el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, se quejara en una carta al fundador y director ejecutivo de la plataforma, Reed Hastings. El programa, que se estrenó el 4 de noviembre, narra la historia de John Demjanjuk, un ucranio emigrado a Estados Unidos que fue condenado en 2011 por haber sido miembro de las SS nazi y guardia de un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial.

En un momento del documental, se muestra en pantalla un mapa de la Polonia actual con los campos de concentración instalados por los nazis durante la contienda, sin especificar que Polonia se encontraba entonces invadida por Alemania. "No hay ningún comentario ni explicación alguna de que estos sitios fueran dirigidos por alemanes, y que Polonia no tuvo nada que ver ya que estaba ocupada por Alemania", dice la carta que Morawiecki dirigió a Hastings, según explicó el propio primer ministro en su cuenta de Facebook. "Mi país ni siquiera existía en ese momento como un Estado independiente, y de hecho millones de polacos fueron asesinados en esos campos de concentración ubicados en nuestro territorio por decisión alemana".

Tras estudiar las quejas, Netflix ha asegurado que corregirá la serie añadiendo un texto en pantalla debajo de los mapas para aclarar el hecho de que se encontraban en territorio ocupado por los nazis. "Estamos muy orgullosos de El nazi Iván el Terrible y apoyamos a sus responsables, su investigación y su trabajo. Para añadir más información a nuestros usuarios sobre los temas tan importantes que se tratan en el documental y para evitar cualquier malinterpretación, en los próximos días se añadirá un texto a algunos de los mapas presentados en la serie", ha dicho un portavoz de Netflix a Variety.

Polonia es muy sensible con su historia, especialmente en lo que se refiere a los campos de concentración que los nazis crearon en su territorio durante la Segunda Guerra Mundial. De hecho, en 2018 su gobierno aprobó una ley que tipificaba como delito el uso de la expresión "campos de concentración polacos" para referirse a los centros de exterminio que estaban situados en el actual territorio polaco, de los que el más conocido es el de Auschwitz. La ley contemplaba multas y penas de hasta tres años de cárcel, pero las críticas de países como Israel y Estados Unidos hizo que Varsovia tuviera que eliminar la pena de prisión.

Los campos fueron construidos y dirigidos por los nazis después de que invadieran Polonia en 1939. Durante la ocupación alemana murieron millones de polacos, incluidos tres millones de judíos polacos en el Holocausto.

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