Una furgoneta con 52 inmigrantes en su interior ha irrumpido a gran velocidad a Ceuta desde Marruecos tras romper las puertas metálicas del paso fronterizo de El Tarajal. El vehículo iba ocupado por 34 hombres, 16 mujeres y dos niños -uno de seis años y otro de cinco meses acompañados de sus madres-, que han sido detenidos a la altura de la playa del Tarajal, a aproximadamente un kilómetro de la frontera, ya en territorio español. Cuatro personas han tenido que recibir asistencia sanitaria.
La furgoneta, de color blanco, llegó a toda velocidad a la frontera del Tarajal y consiguió romper las puertas metálicas, tras lo cual muchos de los inmigrantes se dieron a la fuga corriendo. Los inmigrantes, todos ellos subsaharianos, corrieron en línea recta unos cien metros hasta refugiarse en la barriada costera de la Almadraba, mientras otros se quedaron en el paso fronterizo, algunos doloridos por el fuerte impacto.
A pesar de ello, cuatro han tenido que ser trasladados al Hospital Universitario con un esguince de tobillo, de rodilla, dolor abdominal y vómitos, respectivamente. La institución humanitaria ha repartido entre todos ellos ropa seca y calzado.
El uso de automóviles kamikaze para introducir personas irregularmente en Ceuta se viene repitiendo esporádicamente desde hace 2013, aunque nunca con un número tan elevado de personas.
La puerta del paso del Tarajal, tras ser tumbada por la furgoneta a toda velocidad.
La entrada violenta ha tenido lugar en una madrugada marcada por las adversas condiciones meteorológicas, sobre todo como consecuencia del fuerte viento y de la lluvia que caía en esos momentos sobre la ciudad.
El año pasado el primer conductor condenado en la ciudad por utilizarlo con 14 personas en un todoterreno aceptó por conformidad abonar una multa de 450 euros por un delito de falsedad documental, otros 225 por otro contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y año y medio de cárcel por atentado en concurso con lesiones con empleo de medio peligroso.
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