El documento exhortó también al gobierno colombiano y a los combatientes del ELN (Ejército de Liberación Nacional) "a recorrer el mismo camino" y declaró que los países progresistas estarán "en vigilia internacional, solidaria y fraterna, para garantizar que lo acordado se cumpla en democracia".
Sobre la propuesta de Ecuador de eliminar los paraísos fiscales del mundo, la declaratoria del ELAP convocó "a los pueblos y continentes del mundo a proclamar su adhesión al gran pacto ético y a establecer una estrategia común para erradicar y prohibir los paraísos fiscales, que son instrumentos ilegítimos que perpetúan la dependencia y la explotación de los pueblos del planeta". Respecto a lo que denominaron "injerencia de la derecha", los progresistas se declararon "en lucha y defensa incesante contra el nuevo Plan Cóndor, los golpes blandos y cualquier estrategia injerencista que quieran impulsar cualquier tendencia neoliberal". En este punto condenaron la destitución de la expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y el "montaje judicial" contra la exmandataria argentina Cristina Fernández.
Y aunque saludaron el restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos exigieron "el cese inmediato e incondicional del embargo económico" y de paso solicitaron "la devolución de Guantánamo y las Malvinas a sus dueños genuinos: Cuba y Argentina". La clausura del ELAP tuvo lugar en Quito, tras tres días de reuniones en los que se produjeron 13 mesas temáticas y se dictaron ocho conferencias magistrales. El encuentro convocó a más de 80 organizaciones políticas y a personalidades de ideología progresista.
Sputnik
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