"El miércoles [el 6 de noviembre] comenzó la inyección de gas en las centrifugadoras activas en Fordo en presencia de inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica", dice el comunicado de la agencia.
Por su parte, El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó la llegada de sus inspectores a la planta de Fordo.
"Estamos al tanto de lo que los medios han comunicado hoy en relación con Fordo. Inspectores de la agencia se encuentran en esa instalación iraní e informarán de cualquier actividad relevante a la sede en Viena", dijo a Sputnik un portavoz del OIEA.
La víspera, el vicepresidente iraní y jefe de la Organización de Energía Atómica del país persa, Ali Akbar Salehí, anunció que Irán iniciaría a partir de este 6 de noviembre el enriquecimiento de uranio en su planta de Fordo a un nivel del 5%, en vez del 3,67% fijado en el pacto nuclear de 2015.
En julio de 2015, Irán y seis mediadores internacionales —Rusia, EEUU, el Reino Unido, China, Francia y Alemania— firmaron el llamado PAIC, que impuso una serie de limitaciones al programa nuclear iraní, a cambio del levantamiento de sanciones internacionales.
El PAIC estipula que Irán remodelará la planta de Fordo para acoger un centro de investigación para producir isótopos estables, renunciando a usar sus instalaciones para enriquecer uranio y dejando a Natanz como la única instalación de enriquecimiento de uranio.
Irán comenzó a recortar gradualmente el cumplimiento de sus compromisos nucleares en mayo de 2019, exactamente un año después de que Estados Unidos rompiera el PAIC e impusiera sanciones unilaterales a Teherán.
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