En vísperas de la popular fiesta de Halloween, la compañía lanzó una serie de anuncios titulados 'Sundae Bloody Sundae' (Sundae Sangriento Sundae, en inglés). El sundae es un tradicional postre que consiste de helado cubierto con mermelada dulce y decorado con nata, frutos secos y cerezas.

​No obstante, muchos portugueses vieron en el eslogan de la campaña un recordatorio de trágicos incidente de hace más de 40 años.

El 30 de enero de 1972, en Derry (Irlanda del Norte), tuvo lugar el conocido como Bloody Sunday (domingo sangriento). Aquel día, soldados británicos dispararon contra un marcha de 15.000 personas que protestaban a favor de los derechos de las mujeres y en contra del encarcelamiento sin juicio de sospechosos de pertenecer al IRA.

Unos 28 civiles recibieron heridas de bala de los cuales 13 murieron al instante y otro falleció después de permanecer un mes en cuidados intensivos.

"La campaña [de McDonald's] fue pensada como una celebración de Halloween, no como una referencia insensible a ningún evento histórico o para molestar o insultar a alguien de alguna manera", afirmó un portavoz de McDonald’s en un comunicado reciente.
Esta no es la primera vez que la referencia a la masacre ha provocado una reacción entre la población. Un bar de Londres se disculpó en 2013 por servir un cóctel Sundae Bloody Sundae con un soldado de juguete.

Sputnik

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