"No manejen información falsa para sabotear la lucha de la gente. La solución a la crisis es la renuncia de Jovenel Moise", escribió Michel, portavoz del Sector Democrático y Popular del opositor Consejo Alternativo, en su cuenta de la red social Twitter.

El pronunciamiento de Michel coincidió con la convocatoria de una manifestación pacífica de empleados de la salud pública, que también reclaman la salida de Moise, responsabilizado por la crisis socio-política que sufre la nación caribeña.

Bodeau, presidente de la Cámara de Diputados y hasta ahora un aliado de Moise, admitió en una entrevista radial que la renuncia del presidente era una posible salida a la crisis.

"Estamos en una situación difícil, en la que todos deben mostrar responsabilidad. Pero el que tiene la mayor responsabilidad en este caso es el presidente (…) creo que ha llegado el momento de que el presidente ponga su mandato sobre la mesa e inicie las discusiones necesarias", afirmó Bodeau.

El parlamentario comparó a Haití con "un barco a la deriva" que, aparte del piloto, tiene tripulantes y pasajeros cuyas demandas deben ser escuchadas.

Moise advirtió hace dos semanas que sería irresponsable de su parte renunciar al mandato popular e insistió en el diálogo, pero sin poner su cargo a disposición.

Desde el pasado mes se agudizaron las protestas antigubernamentales en Haití, donde las principales ciudades están paralizadas, la inseguridad crece y el Estado no logra recuperarse de su crisis económica, pese a una serie de medidas de austeridad.

La situación económica de Haití empeoró en los últimos meses por la depreciación de la moneda, el gourde, en el país más pobre de América Latina, y las protestas iniciadas el 7 de febrero dejaron varias decenas de muertes y cientos de heridos.

sputnik

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