Los resultados presentados este jueves por el gigante del comercio electrónico Amazon no han convencido a los inversores, después de que supieran que, por primera vez en dos años, los beneficios trimestrales de la compañía se redujeron. La empresa fundada por Jeff Bezos, que está llevando a cabo una fuerte inversión en un cambio de su infraestructura de transporte de los paquetes, anunció que sus beneficios desde julio a septiembre de 2019 fueron de unos 1.900 millones de euros (2.130 millones de dólares), frente a los cerca de 2.600 millones (2.883 millones de dólares) del mismo período de 2018. Esto supone un descenso en ganancias del 26%, lo que se refleja en una caída en el beneficio por acción desde 5,75 dólares hasta 4,23 dólares de este último trimestre, con lo que no alcanza los 4,59 dólares que anticipaban los expertos.
Los inversores mostraban claramente su descontento tras conocerse estas cifras a raíz del cierre de Wall Street, y las acciones llegaban a caer cerca de un 9% media hora después de darse por concluida la sesión bursátil. El mercado, como señalaban los analistas, preveía un descenso de los beneficios de Amazon, aunque no tan pronunciado, dada la fuerte inversión que ha tenido que llevar a cabo con el cambio en su estructura de transporte, al desarrollar la suya propia en lugar de contratar los servicios de compañías independientes.
Además, está acelerando el servicio de entrega en su servicio Prime, pasando de dos días de entrega a un solo día, a la vez que se está preparando para la temporada de mayor consumo, la que se produce entre el día de Acción de Gracias, a finales de noviembre, y las Navidades. "Estamos aumentando (los esfuerzos) para hacer de nuestra 25º campaña vacacional la mejor que ha habido para nuestros clientes Prime", dijo Bezos en un comunicado remitido a la prensa.
El fundador y director ejecutivo de la compañía se esforzó por subrayar los aspectos positivos de su nueva infraestructura de transporte, que además de una entrega más veloz lleva a una menor emisión de gases de efecto invernadero, ya que los puntos de distribución estarán más cerca de los hogares.
Resultados en lo que va de año
Los resultados presentados por Amazon mejoran si se amplía la perspectiva. Así, tomando los nueve primeros meses de 2019, el beneficio de la empresa alcanza los 8.320 millones de dólares (7.500 millones de euros), un 18,1% más que el mismo periodo del año pasado, gracias a un aumento en las ventas del 20% interanual, hasta superar los 170.000 millones de euros (193.086 millones).
"Los clientes están comprando más a menudo y más productos", explicaba en una llamada telefónica con los periodistas el director financiero de Amazon, Brian Olavsky. En los resultados de este tercer trimestre del año, Amazon ha incluido las ventas de su "Prime Day", que la compañía entonces describió como el mayor evento de compras de su historia, superando el "Black Friday" y el "Cyber Monday" combinados con la venta de más de 175 millones de artículos en 48 horas.
Pero tampoco convencieron las expectativas para el cuarto trimestre del año que presentó Amazon, en el que se esperaban unos ingresos de entre 72.000 y 77.800 millones de euros, notablemente por debajo de los 78.700 millones que vaticinaban los expertos, lo cual apunta a que la temporada navideña será decepcionante. Además, las cifras del último trimestre del servicio de nube de Amazon, Amazon Web Services (AWS), no llegaron a los 8.200 millones de euros que predecían los expertos, para quedarse en 8.100 millones. En los últimos 4 años, AWS ha sido la fuente de la mayor parte de los ingresos operativos de Amazon, por lo que una deceleración en su crecimiento podría suponer menores beneficios en el futuro.
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