Boris Johnson se dispone a subir la apuesta el próximo lunes. El primer ministro ha anunciado que está dispuesto a ceder y dar más tiempo al Parlamento para la tramitación del acuerdo del Brexit alcanzado con la UE, aunque eso suponga tener que prorrogar la fecha prevista del 31 de octubre. A cambio, reclama que la oposición le respalde el próximo lunes y apruebe un adelanto de las elecciones generales para el próximo 12 de diciembre. "Los diputados dispondrán de ese modo de todo el tiempo que deseen para escrutar la ley, antes de que el Parlamento sea disuelto", ha dicho Johnson a Sky News. El líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, ha anunciado que no respaldará la convocatoria electoral hasta que la opción de un Brexit sin acuerdo esté descartada.

El primer ministro no puede decidir por sí solo un adelanto electoral. La Ley del Mandato Parlamentario Fijo, aprobada en 2011, establece dos únicas vías para lograrlo. O bien la decisión cuenta con el respaldo de dos tercios de la Cámara, es decir, 432 diputados, o bien es el producto de una moción de censura a la que no siga un Gobierno alternativo. En dos ocasiones anteriores, el Parlamento ha rechazado el intento de Johnson de convocar las urnas.

Las circunstancias, sin embargo, han cambiado drásticamente. Londres y Bruselas han alcanzado un acuerdo sobre el Brexit, que ha sido aprobado por Westminster en primera lectura. El problema para el Gobierno es que una mayoría de diputados le ha obligado a tramitar en condiciones el proyecto de ley, y no en los tres días apresurados en los que pretendía hacerlo. La consecuencia inmediata es que Johnson debería aceptar la prórroga de la fecha de salida a la que se había resistido hasta ahora.

El líder laborista, Jeremy Corbyn, ha anunciado que solo respaldará la convocatoria de elecciones cuando la opción de un Brexit sin acuerdo esté descartada. Corbyn lleva un año reclamando los comicios, pero una gran porción de su formación no considera que el momento sea el apropiado. El laborista había puesto como condición para respaldar un adelanto que quedara definitivamente asegurada una prórroga del Brexit, para evitar una salida desordenada de la UE el 31 de octubre. A partir de esa garantía, dijo, respaldaría una convocatoria a las urnas. Muchos en sus filas creen que debe dar prioridad a un nuevo referéndum. Temen que la escasa popularidad entre los votantes de su líder y el buen momento de Johnson, con un acuerdo del Brexit debajo del brazo, les haga añicos.

Si todos los diputados conservadores respaldaran la propuesta de adelanto electoral el lunes, y se sumaran a ellos los 35 diputados del Partido Nacional Escocés y los 19 de los liberaldemócratas (ambas formaciones reclaman también elecciones generales), bastarían unos 90 laboristas para que los británicos acudieran a las urnas pocos días antes de que comience el periodo navideño.

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