El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, han acordado una serie de medidas respecto a las próximas acciones a implementar para normalizar la situación en Siria.
Entre los puntos pactados sobresale el "compromiso de preservar la unidad política y territorial" del país árabe, así como de garantizar "la seguridad nacional de Turquía".
Por otro lado, ambas partes concordaron en la necesidad de "luchar contra el terrorismo en todas sus formas" y contrarrestar las "tendencias separatistas" en el territorio sirio.
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