"Expresamos profundo descontento y una fuerte protesta en relación con la adopción por parte de la Cámara de Representantes de EEUU de la llamada Ley de Derechos Humanos en Hong Kong", dice el comunicado del Ministerio de Exteriores de China.
Según la Cancillería china, en la actualidad el problema de Hong Kong no tiene que ver de ninguna manera con el tema de los derechos humanos o la democracia, el objetivo es cesar la violencia, restablecer el orden y garantizar el Estado de derecho.
"Esta es una política de doble rasero en su pura esencia. Revela a fondo el extremo grado de hipocresía de Estados Unidos en los asuntos de derechos humanos y democracia, así como sus intenciones maliciosas de socavar la estabilidad y la prosperidad de Hong Kong para frenar el desarrollo de China", señala.
"China tomará contramedidas eficaces en respuesta a decisiones erróneas de Estados Unidos para proteger la soberanía social, la seguridad y los intereses de desarrollo", añade.
Pekín reiteró una vez más que Hong Kong es parte de China y es exclusivamente un asunto interno de China, volvió a instar a Washington a que deje de interferir en los asuntos internos de China.
Los detenidos en protestas
Por su parte, la jefa del Ejecutivo de Hong Kong, Carrie Lam, declaró que la Policía de Hong Kong detuvo a más de 2.200 personas que participaron en 400 protestas antigubernamentales desde junio pasado.
Lam debía pronunciar un discurso político en la Asamblea Legislativa, pero los parlamentarios de la oposición no le permitieron hablar gritando consignas de protesta e instando a Lam a renunciar. La funcionaria abandonó la sala y dirigió a los residentes de Hong Kong un vídeo mensaje.
Según Lam, "más de 400 manifestaciones y marchas tuvieron lugar en varias regiones durante los últimos cuatro meses, y la mayoría de las veces derivaron en protestas con el uso de la violencia, como resultado sufrieron heridas más de 1.100 personas, fueron detenidas más de 2.200 personas".
"Hong Kong siempre ha sido una de las ciudades más seguras del mundo, era una ciudad civilizada, libre, pluralista y sin prejuicios, una ciudad donde se respetaban las leyes. Y en solo unos meses, las áreas afectadas por el conflicto social, que estalló por la resistencia a las enmiendas a la ley de extradición, se expandieron", señaló.
Sputnik