Idalia Yamileth Herrera Hernández, madre migrante hondureña de 26 años, murió con su hijo Iker Gael Córdova Herrera, de 21 meses de edad, al querer cruzar el río Bravo en México, así lo informó un portavoz de la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).
Según un comunicado de Relaciones y Exteriores de Honduras, madre e hijo habían ingresado recientemente a EE.UU. donde la madre hizo una solicitud de asilo, pero fueron enviados a Matamoros (México) para esperar una audiencia en la Corte de Inmigración. Sin embargo ante la desesperación murieron ahogados.
La madre y el niño durmieron en las calles y refugios en Matamoros en México durante semanas y, según las autoridades, estaban en proceso de ser repatriados a Honduras. Líderes comunitarios culpan al Gobierno de Trump por estas muertes de migrantes.
Según las organizaciones como carecen y chirla. El endurecimiento de las políticas migratorias de EE.UU. ha provocado una acumulación de migrantes en la frontera mexicana que han saturado ciudades como Matamoros, o Tijuana, donde muchos de los que esperan la fecha de su corte migratoria, no tienen cabida en los albergues y deben dormir a la intemperie sin acceso a servicios higiénicos y con dificultades para conseguir comida, por ello muchos se arriesgan a cruzar ilegalmente.
HispanTV