Durante la conferencia de prensa, las preguntas a las que respondía Lavrov versaban sobre el mismo tema que abordó en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es decir, la crisis siria y el acuerdo del alto el fuego en ese país al que llegaron el 12 de septiembre Rusia y EE.UU.
En este contexto, Lavrov repudió los “casi 350 ataques” que, según indicó, ha lanzado la oposición siria contra el Ejército en la ciudad siria de Alepo (noroeste) a partir del 12 de septiembre y alabó el desempeño de las fuerzas de Damasco en respetar la tregua.
El jefe de la Diplomacia rusa anunció que Moscú no tiene ningún plan B para la paz en Siria y aseguró estar convencido de que por vía militar no puede solventarse esa crisis.
En otro momento de sus declaraciones, Lavrov volvió a pedir que se separen a los elementos terroristas como el EIIL (Daesh en árabe) y Fath al-Sham (antiguo Frente Al-Nusra)– excluidos automáticamente del alto el fuego acordado– de las fuerzas de la llamada “oposición”.
A este respecto, expresó la disposición de Rusia para elaborar un mapa con las posiciones de los terroristas de la agrupación Fath al-Sham. “Hemos creado una organización de Ginebra en la cual hay representantes rusos que están dispuestos a preparar un mapa con posiciones de Fath al-Sham para que nadie se indigne cada vez que se realicen ataques en su contra”, dijo.
Lavrov también hizo referencia al reciente ataque aéreo de EE.UU. contra las tropas del Ejército sirio en la provincia siria de Deir al-Zur (este) y el ataque a un convoy humanitario de la Organización de las naciones Unidas (ONU) en Alepo como casos en los que se ha socavado dicho acuerdo.
Igualmente, pidió que se permita acceso al lugar del ataque para esclarecer los hechos y dijo que el secretario del Estado estadounidense, John Kerry, ha afirmado últimamente que EE.UU. también está interesado en investigar lo sucedido.
HispanTV.Es
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