Como método de rehabilitación, muchos dentistas recurren a la implantación dental, si bien este tipo de cirugía acarrea ciertas complicaciones. Durante las investigaciones de la Universidad Federal de Siberia y el Instituto de los Problemas Médicos de la sucursal siberiana de la Academia de Ciencias de Rusia se descubrió el origen de la periimplantitis. El informe, recientemente publicado por científicos rusos, indica que el mencionado proceso inflamatorio puede ocasionarse por las huellas de sustancias no orgánicas sobre los implantes esterilizados.
Según los expertos, la periimplantitis provoca edemas, hemorragias e inflamación de los tejidos blandos y la dentadura en la zona de la prótesis.
La causa de las citadas consecuencias es que, en la superficie del nuevo implante, se registren las huellas de contaminación de elementos no orgánicos, tales como fósforo, silicio, azufre, carbono, y otro gran número de elementos químicos extraños.
La forma de evitar la periimplantitis es la descontaminación láser que limpia la superficie de los dientes implantados, aseguran los científicos. En caso de aplicarse este método, las materias extrañas se eliminan de los nuevos implantes que se logran integrar exitosamente sin inflamaciones.
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