El 12 de septiembre se declaró en Siria un alto el fuego, punto clave de un paquete de acuerdos entre EEUU y Rusia que, por lo poco que trascendió a la prensa, estipulaba también, si la tregua se volvía sostenible, separar grupos de los rebeldes "moderados" de los terroristas y coordinar los ataques rusos y estadounidenses contra Daesh, Frente Fatah al Sham (antiguo Frente al Nusra).
Al cabo de una semana, el Ejército sirio renunció al armisticio alegando numerosas infracciones por parte de los insurgentes. Sputnik
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