"El Sultanato está en contacto con todas las partes para garantizar el paso seguro de los barcos comerciales que cruzan el estrecho al tiempo que preserva los derechos sobre sus aguas territoriales. Espera la liberación del barco británico por parte de Irán y exhorta a la República Islámica del Irán y al Reino Unido a resolver sus diferencias a través de canales diplomáticos" publicó la Cancillería omaní en su cuenta de Twitter.

​​El comunicado añade que Omán "sigue con gran interés el proceso de navegación en el estrecho de Ormuz y exhorta a todos los Estados a que actúen con moderación, respeten las líneas de separación marítima y el derecho marítimo internacional sin poner en peligro a la región de esta manera".

La pequeña monarquía del golfo Pérsico hizo este llamado en medio de una escalada de tensión entre Teherán y Londres, provocada por la detención de buques petroleros.

El 19 de julio, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán informó del apresamiento del petrolero Stena Impero en el estrecho de Ormuz por supuesta violación de las normas internacionales.

A bordo del buque, que navegaba bajo bandera británica, había 23 tripulantes, entre ellos tres ciudadanos rusos, así como nacionales de la India, Letonia y Filipinas.

Según la empresa operadora, Stena Bulk, se está preparando ya una solicitud formal para visitar a los tripulantes del barco, anclado ahora en el puerto iraní de Bandar Abbas.

El presidente del Parlamento de Irán, Alí Lariyaní, confirmó que el petrolero fue apresado en represalia por la detención del buque Grace 1 con un cargamento del crudo iraní en Gibraltar.

A su vez, el viceministro de Defensa del Reino Unido, Tobias Ellwood, exhortó a reducir la tensión, pero calificó la detención del Stena Impero como "un acto hostil" y dijo que se está barajando "una serie de opciones" al respecto.

También afirmó que Londres hará su papel para que las vías marítimas en esta zona de importancia estratégica se mantengan abiertas, y celebrará consultas con aliados a tales efectos.

Por su parte, el embajador iraní en Londres, Hamid Baiedinejad, advirtió que Irán se mantiene firme y listo para diferentes escenarios.

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