Al igual que a la llegada, el miércoles, fue el gobernador del Territorio de Primorie, Oleg Kozhemiako, quien presidió la ceremonia oficial con una guardia de honor y una orquesta militar durante la despedida de Kim en la estación ferroviaria.
Por la mañana, el líder norcoreano había asistido a una ceremonia de ofrenda floral en un complejo conmemorativo de la Flota rusa del Pacífico.
El 25 de abril Kim Jong-un se reunió por primera vez con el presidente ruso, Vladímir Putin, en la Universidad Federal del Lejano Oriente (DVFU) en la isla Russki, cerca de Vladivostok.
Tras un cara a cara que se prolongó por casi dos horas en lugar de los 50 minutos previstos, la cumbre continuó durante una hora y media más en un formato ampliado, con la participación de las delegaciones oficiales.
Fue la primera visita de Kim a Rusia desde que subió al poder en 2011, y también su primer viaje al extranjero desde la reelección como presidente de la Comisión de Asuntos Estatales a principios de abril.
Los detalles de la visita de Kim a Rusia se mantuvieron en secreto hasta última hora por motivos de seguridad. Solamente el martes, el asesor del Kremlin para asuntos internacionales, Yuri Ushakov, confirmó que Putin se reuniría con Kim en Vladivostok el 25 de abril.
La anterior cumbre Rusia-Corea del Norte tuvo lugar en 2011, cuando el padre del actual líder de Corea del Norte, Kim Jong-il, se reunió con el entonces presidente ruso Dmitri Medvedev en Ulan-Udé.
Putin viajó a Corea del Norte en 2000, en lo que fue la primera visita de alto nivel en la historia de las relaciones bilaterales. Un año más tarde se reunió con Kim Jong-il en Moscú, y en 2002 tuvieron otra ronda de conversaciones en Vladivostok.
Sputnik
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