Los mandatarios de países vecinos como el Chad o el Congo asistieron a la ceremonia, así como el primer ministro belga, Charles Michel. Desde el país africano no ven con buenos ojos la ausencia del presidente francés, Emmanuel Macron, que declinó la invitación por motivos de agenda. Kagali acusa a París de haber sido cómplice del Gobierno hutu y de haber participado en las matanzas, hecho que el Elíseo siempre ha negado.
Este viernes Macron anunció la creación de una comisión de historiadores que, a partir de "todos los archivos franceses", tendrán que determinar cuál fue el papel de Francia durante el periodo que abarca los años 1990-1994. Asimismo, el presidente galo declaró el 7 de abril como día conmemorativo en recuerdo de las víctimas del genocidio de Ruanda.
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