Amano ha informado de los últimos datos a la Junta de Gobernadores de la AIEA, cuya reunión se produce después del fracaso de la cumbre mantenida la semana pasada por el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong Un, en Hanói.

Aunque los inspectores de la AIEA no están autorizados a entrar en Corea del Norte, han estado usando imágenes de satélite y documentos disponibles para hacer un seguimiento del complejo nuclear de Yongbyon, que tiene suspendida la producción de material fisible para el programa nuclear norcoreano.

"En el reactor de agua ligera, (la AIEA) vio indicios de trabajo de construcción en curso", ha señalado Amano, que ha añadido que la agencia "sigue observando indicios del uso continuado de la instalación de enriquecimiento por centrifugado".

La AIEA se interesa por el uranio enriquecido porque el material puede usarse en cabezas nucleares. Los reactores de agua ligera también pueden usarse para producir material armamentístico, usando las barras de combustible nuclear usado y extraer el plutonio que contienen. Sin embargo, Amano ha dicho que sus expertos no han visto ningún signo de reprocesado de plutonio recientemente en Yongybyon.

Trump dijo en Hanói que Kim había prometido mantener la moratoria sobre los ensayos nucleares y de misiles. Sin embargo, Estados Unidos quiere en último término que el país desmantele sus instalaciones de armamento nuclear.

"La AIEA sigue de cerca los acontecimientos internacionales sobre la cuestión nuclear norcoreana", ha asegurado Amano, que ha expresado su confianza en que "estos procesos lleven a un acuerdo y a la aplicación de medidas concretas de desnuclearización".

Asimismo, ha asegurado que la agencia atómica sigue estando "dispuesta a emprender acciones de verificación y observación en Corea del Norte si se alcanza un acuerdo político entre los países concernidos".

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