Las autoridades de Australia han confirmado que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, tiene un pasaporte válido, lo que representa una oportunidad para el periodista asilado en la Embajada de Ecuador en Londres (Reino Unido) de regresar a Australia. Según indica Reuters este hecho representa un desarrollo clave de la situación de Assange, quien teme que Ecuador busque terminar su asilo en su legación británica y extraditarlo a EE.UU.

Durante una audiencia del Senado australiano el jueves pasado, funcionarios de alto rango del Departamento de Relaciones Exteriores y Comercio (DFAT, por sus siglas en inglés) confirmaron que el nuevo pasaporte de Assange fue emitido en septiembre del año pasado. El antiguo pasaporte del periodista australiano había expirado.

El senador Rex Patrick, que asumió la causa del fundador de WikiLeaks en el Parlamento australiano, preguntó a los funcionarios del DFAT si habían hablado con los representantes de EE.UU. acerca del paso seguro para Assange si abandonaba la Embajada ecuatoriana. A lo que James Larsen, el oficial principal de asuntos jurídicos del Departamento aseguró que no estaba al tanto de "ningún proceso legal iniciado en Estados Unidos o por parte de Estados Unidos respecto al señor Assange".

Por otra parte, en noviembre pasado el Departamento de Justicia de EE.UU. reveló "accidentalmente" la existencia de acusaciones "bajo sello" contra el periodista australiano, quien había publicado secretos diplomáticos y militares estadounidenses. Esta investigación, que empezó bajo la administración de Barack Obama, y los potenciales cargos son la razón principal por la que Assange sigue asilado en la Embajada de Ecuador en Londres. En este sentido, los partidarios de Assange siguen convencidos de que Estados Unidos buscará su extradición si el periodista sale de la legación ecuatoriana en el Reino Unido.

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