"El excapitán del ejército, Telmo Castro, quedó detenido la tarde de este viernes 21 de diciembre de 2018. La aprehensión se produjo porque el pasado 8 de diciembre no se presentó a la Casa de Confianza de Guayaquil", dijo el diario El Comercio.
La presentación en la Casa de Confianza era una medida que Castro debía cumplir obligatoriamente como parte de su prelibertad concedida el pasado agosto y cuestionada por diversos sectores entre ellos el Consejo de la Judicatura y el Ministerio de Justicia.
El Consejo de la Judicatura, órgano administrativo de la Función judicial, dispuso recientemente una auditoría integral a todos los casos de prelibertad que se han dado en Ecuador por las presuntas irregularidades detectadas en la orden de prelibertad a favor de Castro, quien cumplía una condena por delitos de narcotráfico.
En octubre de 2009, Castro fue detenido por la policía de Ecuador en la población de Baeza (oriente) durante el operativo antinarcóticos denominado "Aniversario", cuando transportaba 500 kilos de cocaína en un camión con logotipos falsos del Ejército.
Fue sentenciado a dos años de cárcel, se acogió a una rebaja de penas y cumplió menos de la mitad de la sentencia.
En junio de 2013 volvió a ser detenido cuando cargaba más de 300 kilos de cocaína en una avioneta con matrícula mexicana; y tras varios recursos legales terminó con 14 meses de cárcel.
Castro fue sentenciado a 13 años de prisión y desde agosto de 2018 goza de prelibertad.
La jueza que le concedió la libertad es investigada tras denuncias de irregularidades en el proceso.
Castro y Washington Prado, alias "Gerald", considerado como el Pablo Escobar ecuatoriano, habrían sido los socios de capo mexicano Joaquín "El Chapo" Guzmán a nivel local.
Prado fue detenido por autoridades colombianas y extraditado en febrero pasado a Estados Unidos.
En días pasados, el narcotraficante colombiano Jorge Cifuentes, en el juicio que se realiza contra Guzmán en Estados Unidos, afirmó que el cártel de Sinaloa involucró a militares ecuatorianos para mover droga entre la frontera entre Colombia y Ecuador y transportarla a altamar para que llegara finalmente a México y Estados Unidos.
Cifuentes mencionó a Castro como el hombre al que se le pagó 100 dólares por cada kilo de droga que cruzaba la frontera.
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