El incendio forestal en Canadá, que se ha podido tomar bajo control, se ha cobrado dos vidas.
Los que han sido los primeros en ofrecer su ayuda al pueblo de Fort McMurray, localidad evacuada por el incendio, han sido los musulmanes canadienses y los refugiados sirios.
Cerca de 100.000 personas han sido evacuadas a causa del incendio forestal en el estado Alberta.
Los refugiados sirios, que llegaron hace poco al país, y la Asociación de Ayuda Islámica han sido los primeros voluntarios en ayudar a los afectados canadienses.
“Ahora nos toca a nosotros devolver el favor”. Han afirmado 25.000 sirios y la asociación que se han movilizado para recolectar materiales de ayuda para el pueblo de Fort McMurray.
En tanto, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha anunciado que el Estado contribuirá a la ayudas con 1 dólar del presupuesto federal para cada dólar a pagar como ayuda a través de la Cruz Roja de Canadá.
Por otro lado, las labores para sofocar el incendio continúan sin interrupción. El área dominada por el incendio se ha extendido de 10 mil hectáreas a 90 mil hectáreas.
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