"Lo fundamental tiene que estar cerrado para que así la gente esté lo más informada posible a la hora de dar su respuesta", dice EcheniqueIU se rinde a Podemos sin condiciones concretas

Podemos ya tiene fechas para consultar a sus bases sobre el pacto con Izquierda Unida: el 10 y el 11 de mayo. Justo al límite del plazo para negociar, pues el resultado se anunciará el jueves 12, el último día para inscribir las coaliciones electorales.Por tanto, las conversaciones tienen que fructificar como tarde el próximo lunes con un acuerdo en los asuntos más importantes, pues la intención de Podemos es que sus militantes, a diferencia de los de IU, puedan opinar con conocimiento de causa: el nombre de la candidatura, cuántas personas de IU se integrarán en los puestos de salida de las listas o, incluso, quiénes serán."Lo fundamental tiene que estar cerrado antes del día 10, para que así la gente esté lo más informada posible a la hora de dar su respuesta", señaló ayer el negociador de Podemos, Pablo Echenique, que establece que el "plazo" para el acuerdo es el del referéndum interno.

El secretario de Organización de Podemos mantiene una prudencia absoluta sobre el estado actual de las negociaciones, que avanzan pero a un ritmo mucho más lento del que tenían previsto en un primer momento. El plan inicial era anunciar el acuerdo hoy, antes del Consejo Político Federal de IU. Sin embargo, fuentes de ambas organizaciones dan por hecho que el diálogo se va a extender durante el fin de semana. Y quién sabe si hasta el mismo lunes. Lo que denota que siguen enquistados algunos de los escollos principales, como las listas electorales, el reparto de fondos en función de los votos o la marca electoral.Secretismo en las negociaciones Echenique justificó tanto secretismo en las negociaciones para no generar situaciones que puedan provocar la ruptura del diálogo. "Somos conscientes de que, en muchas ocasiones, se ejerce una presión al interlocutor que se basa en generar una cierta opinión pública respecto de lo que cada uno pide. Como esto no es una negociación entre adversarios, sino entre compañeros, y como queremos de verdad llegar a un acuerdo, desde el principio hemos renunciado voluntariamente a actuar de este modo", manifestó el número tres de Podemos.Echenique y su homólogo en IU, Adolfo Barrena, están "todo el día conectados" a través de mensajes en el móvil y correos electrónicos para superar los últimos escollos.

En el caso de las listas electorales, Podemos e IU mantienen un pulso por el número de miembros de la organización de Garzón que se harán un hueco en los puestos de salida de las listas. Dentro del partido morado fijan cifras entre cinco y ocho como mucho, mientras que IU quiere hacer valer no sólo su reciente millón de votos, sino también las perspectivas electorales que dibujan las encuestas, con un aumento de sus opciones: triplicando sus dos escaños actuales hasta los seis. Así en IU quieren hasta una decena de puestos. Por lo que creen que sacarían hoy yendo en solitario y por los escaños que ayudarían a ganar (14 si se toman como base los resultados del 20-D),Además, IU juega con la necesidad de Podemos de formar esta alianza para garantizarse una segunda oportunidad de lograr lo que el 20 de diciembre no pudo conseguir en solitario: superar al PSOE e intentar liderar la alternativa al PP.

Respecto al nombre de la candidatura, hay quien apunta que la coalición podría llamarse Podemos-Unidad Popular, que borraría las siglas de IU con la coartada de utilizar la marca genérica que ya le acompañó el 20-D. Sin embargo, ninguna fuente oficial quiere confirmar este extremo. Lo que sí cobra fuerza es que, tras el 26-J, IU acabe desgajándose de Podemos para ir al Grupo Mixto y mantener visibilidad e independencia respecto a la formación de Pablo Iglesias. Algo que también pretenden que así suceda desde las filas de Podemos.

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