“La maniobra consiste en esgrimir que Cuba obstaculiza el otorgamiento de visas para los funcionarios designados en la Embajada de Estados Unidos en Cuba, lo que supuestamente dificulta el desempeño de esa Misión Diplomática”, lamenta la Cancillería del país caribeño en un comunicado emitido el miércoles.

Según el texto, en los últimos meses, el Departamento de Estado de EE.UU. ha ido inventado un nuevo “pretexto” para afectar los vínculos diplomáticos bilaterales y, esta vez, usa el proceso de emisión de las visas diplomáticas y oficiales que requieren “las embajadas en Washington y en La Habana”.

La nota, recogida en el portal Cuba Debate, pone de relieve que la “maniobra” encubre “deliberadamente” que fueron las autoridades estadounidenses las que decidieron “unilateralmente” reducir el personal de su embajada en la mayor de las Antillas en septiembre de 2017 tras los supuestos “ataques sónicos”.

Al recordar la expulsión “arbitraria e injusta” de 15 diplomáticos de la embajada cubana en Washington en octubre de 2017, La Habana recalca que, desde esa fecha, el funcionamiento de ambas misiones “se ha visto afectado” y la emisión del visado ha estado sujeta a “aprobaciones y dilaciones caprichosas” del Departamento de Estado de EE.UU.

Acusar a Cuba de ocasionar una “situación insostenible” para el funcionamiento de las legaciones diplomáticas de ambos países supone una “flagrante distorsión de la verdad”, se insiste en el texto.

A este respecto, señala que, desde fines de septiembre del año pasado, el país norteamericano solo ha otorgado 26 visados y ha denegado seis para el personal de Cuba en su embajada en Washington, mientras que Cuba en el mismo período ha emitido 105 visados para diplomáticos estadounidenses y solo ha denegado uno.

En 2015 y después de medio siglo de ruptura, Cuba y Estados Unidos restablecieron relaciones diplomáticas, pero la normalización de lazos se vio afectada tras la llegada a la Casa Blanca de Donald Trump en 2017.

La isla ha negado una y otra vez toda responsabilidad en los “ataques acústicos” y asegura que los ha estado investigando desde que fueron denunciados; sin embargo, ha criticado la falta de pruebas de los incidentes y de la cooperación de las autoridades norteamericanas a la hora de compartir datos. 

HispanTV.es

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