Las pantallas de ordenador, televisores, paneles, lámparas, tabletas y smartphones emiten gran cantidad esta luz azul. Todos estos elementos forman parte de nuestro trabajo y/o ocio, y nos pasamos muchísimas horas frente a ellas.

Un nuevo estudio aclaró aún más el mecanismo con el que los carotenoides maculares pueden proteger los ojos del daño de la luz azul.

En el estudio se usó una formulación que incluía los tres carotenoides que componen el pigmento macular: luteína, RR-zeaxantina y RS meso-zeaxantina. Estos se encuentran en los ojos de forma natural y varios estudios han señalado que la reducción de ellos se relaciona con problemas visuales.

En este nuevo estudio publicado hace pocas semanas en la revista Nutrients y escrito por investigadores de universidades de China y Clevenald (EE.UU.), se hace referencia a los posibles mecanismos de los carotenoides para proteger contra el daño que causa la luz azul en la visión humana.

“Es casi como si tuvieras un muro de castillo delante de ti que está recibiendo cañonazos. Va a haber un agujero en esa pared a menos que sustituyas los ladrillos”, explicaban en una entrevista los autores del estudio.

“Lo que establecemos con esto es que en cierto periodo de tiempo la luz azul daña las células responsables de la visión si se deja desprotegidas”, añadieron.

“Estamos demostrando está correlación. La luz azul va a reducir los pigmentos maculares y mediante la suplementación de estos se pueden mantener los niveles lo suficientemente elevados como para protegerte del paso del tiempo”.

Detalles y resultados del estudio
El estudio se ha llevado a cabo con ratones que han sido expuestos a la luz azul. “No hicimos que los ratones observaran la pantalla de un iPad durante todo el día, pero creamos un entorno en el que vivían con una luz azul de ambiente”, dijo uno de los investigadores principales.

Algunos ratones recibieron suplementación con la formulación de carotenoides, mientras que el resto no recibieron nada. Descubrieron que, en comparación con el grupo de control, los ratones que recibieron suplementación tenían sus carotenoides maculares más intactos (tomando como referencia la densidad óptica del pigmento macular o DOPM).

Los investigadores también observaron las células de los ojos y cual era su rendimiento y descubrieron que en el caso de los animales que estaban expuestos a la luz azul, si no estaban protegidos, el rendimiento de esas células disminuía.

Implicaciones en nuestro día a día
Pasamos muchas horas delante del ordenador, consultando nuestra tablet o mirando la pantalla del smartphone, y no solo nuestra cabeza lo sufre, también nuestros ojos. La luz azul es un problema al que estamos cada vez más expuestos.

Debemos ser conscientes del riesgo que supone esta exposición prolongada y tomar medidas de protección entre las que se incluya un aporte adecuado de carotenoides a partir de la dieta y, si es necesario, de los suplementos.

grandesmedios.com

Etiquetas: laluzazul   ciencia