Según el autor,Moscú está descontento con los intentos del premier armenio Nikol Pashinián exterminar la vieja élita de Armenia sobreentendiendo el equipo del expresidente Serzh Sargsyán.
"En condiciones de la ausencia explícita de una política regional de los EEUU la situación política en Ereván permite a Moscú tener un aspecto atractivo para Bakú".
A su juicio, "la revolución de terciopelo" en Armenia muestra que los procesos parecidos no llevan a la paz a pesar de que la mayoría pusieron sus esperanzas en el balance de las reformas que podrían conllevar la paz en la región".
"Además de esto, reitiro que la existencia de los conflictos pendientes no lleva la utilidad a las partes de enemigo,sino sólo a Moscú"-resume el autor.
Roksana Tarlan
AzVision Español