Desde muy temprano y con una fuerte presencia policial que suscitó algunos enfrentamientos, los taxistas salieron a las calles para defender su fuente laboral.
Con una marcha lenta por las principales avenidas y carreteras del área metropolitana, los taxistas de Costa Rica le exigieron al Gobierno que ponga fin a las operaciones de Uber en el país.
Con poco más de un año de operaciones en Costa Rica, Uber ha rebajado las tarifas del transporte de pasajeros a la mitad, esto sin que los taxistas puedan igualar los precios de los viajes dado el alto costo de los permisos, revisiones y seguros que deben pagar para trabajar legalmente.
Con una fuerte presencia de policía antimotines y de tránsito, la manifestación de los taxistas fue reprimida desde muy temprano, impidiendo cualquier bloqueo de rutas.
Los trabajadores denuncian un trato desigual en relación con otros movimientos sociales donde si se les permite ejercer el derecho a la protesta.
La jornada de manifestaciones dejo un inusitado saldo de 80 detenidos y más de 30 automóviles requisados, cifras elevadas para un país como Costa Rica.
Mauricio Inostroza, San José.
Etiquetas:
