"Debemos sentarnos a negociar con respeto recíproco (…) Abogamos por la reconciliación sin presiones de ningún tipo", dijo el titular otomano de Exteriores, Mevlut Cavusoglu, en una reunión de embajadores de Turquía en Ankara.
El 10 de agosto, EEUU impuso aranceles del 50% a las importaciones de acero y del 20% a las de aluminio de Turquía, el doble de las tasas aprobadas en marzo 2018.
La medida golpeó fuertemente al sector bancario otomano. Desde el 10 de agosto la divisa turca perdió más del 20% de su valor y el 13 de agosto alcanzó mínimos históricos al cotizar 7,13 liras por dólar.
El ministro constató que últimamente "las relaciones con Estados Unidos llegaron a un punto indeseado".
"Los estadounidenses no han dado ni un solo paso en relación con FETO (movimiento del clérigo islamista Fethullah Gulen cuya extradición Ankara reclama a Washington), aunque les hemos enviado toda la documentación necesaria", señaló.
Estados Unidos, remarcó Cavusoglu, no conseguirá nada de Turquía con amenazas y sanciones.
"Esperamos que las relaciones se normalicen", apostilló.
El canciller acusó también a la cúpula gobernante de Washington de torpedear la asociación estratégica con Turquía.
"Tratan de resolver sus problemas políticos internos a costa de Turquía, pese a todo Ankara sigue con su posición constructiva", puntualizó.
Cavusoglu dijo también que a pesar de los intentos estadounidenses de deteriorar la imagen de Turquía, el país sigue siendo uno de los destinos más atractivos para las inversiones.
Las relaciones entre los dos países se desgastaron también por el caso del pastor evangélico estadounidense Andrew Brunson.
El hombre fue arrestado casi tres meses después del fallido golpe de Estado de julio de 2016 contra el presidente turco.
El estadounidense tendría nexos con el movimiento de Gulen, al que Ankara responsabiliza de la intentona golpista.
La justicia acusa además a Brunson de apoyar al Partido de los Trabajadores del Kurdistán, reconocido como terrorista en Turquía.
El 1 de agosto, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones contra los ministros de Justicia y del Interior de Turquía, al acusarlos de violación de derechos humanos y corrupción.
Según Washington, los dos ministros facilitaron la detención del pastor evangélico.
Sputnik
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