La Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC, por sus siglas en inglés) ha adquirido las acciones de Total y gestionará la mayor parte del proyecto de extracción de crudo de la 11ª fase de este campo petrolífero situado en el suroeste del Golfo Pérsico.

El funcionario del Ministerio de Petróleo iraní Mohamad Mostafavi, citado por la agencia local de noticias IRNA, explicó que la CNPC ha sustituido a Total luego de que esta última haya decidido abandonar los compromisos adquiridos con Irán a mediados de 2017 por temor a que las sanciones económicas estadounidenses contra Teherán perjudiquen sus otros acuerdos internacionales.

Esta situación se da después de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, conminó a las empresas internacionales a desistir de hacer negocios con la República Islámica, si no quieren que sus macronegocios en el mercado estadounidenses se vean afectados por acciones punitivas similares a las impuestas a Teherán.

El pasado mayo, el inquilino de la Casa Blanca decidió de manera unilateral sacar a su país del pacto nuclear suscrito en 2015 por Irán y el entonces Grupo 5+1, integrado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, China y Rusia más Alemania.

Mostafavi detalló que tras remplazar a Total, la estatal china posee el 80 por ciento de las acciones en el proyecto de 5 mil millones dólares.

Además, señaló que la CNPC es una de las cinco compañías petroleras más grandes del mundo, con un crecimiento sostenible y rápido, que la perfila como un competidor importante en el mercado internacional.

Total desatiende sus compromisos con Irán aun cuando tiene el respaldo de la Unión Europea (UE), que el 6 de agosto para proteger a los operadores económicos europeos involucrados en negocios con Irán, actualizó su estatuto de bloqueo a fin de evitar el impacto de las sanciones extraterritoriales de EE.UU.

HispanTV.es

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