Las pesquisas empezaron en 2017 en Múnich, luego se hizo cargo la fiscalía de Brunswick.
En enero de 2017, el banco Sparda comunicó a la Policía sobre transferencias sospechosas de dos y cinco millones de euros de una cuenta de Winterkorn a la de su asesor fiscal.
Más tarde se descubrió otra transferencia. La mayor parte del dinero (alrededor de 10 millones de euros) fue enviada a Suiza al banco Vontobel.
Unos tres millones y medio de euros fueron a parar a la cuenta de su mujer.
Según una de las versiones, podría tratarse de un regalo, en ese caso se tuvo que pagar un impuesto de casi 560.000 euros.
El abogado de Winterkorn, Felix Dorr, rechazó todas las sospechas.
"Según el asesor fiscal de Winterkorn, estas operaciones estaban libres de cualquier carga tributaria", aclaró el letrado.
Sin embargo, los jueces instructores descubrieron otro caso sospechoso, esta vez vinculado a transferencias de la cuenta del ex alto ejecutivo a la de su hijo, quien luego enviaba dinero a otra cuenta de Winterkorn en el banco Sparda.
La investigación sospecha que Winterkorn pretendía guardar dinero en caso de que le declarasen culpable del escándalo de los motores diesel de VW descubierto en 2015 y responsabilizaran por las pérdidas económicas.
En mayo, la justicia estadounidense acusó formalmente a Winterkorn de fraude por los motores diesel trucados.
Winterkorn fue director general de Volkswagen y presidente del consejo de administración de la compañía de 2007 a 2015.
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