"Propongo crear un grupo técnico de trabajo con participación de todas las partes que impusieron sanciones a Siria para darle la oportunidad a los comerciantes, agentes financieros y trabajadores humanitarios en Siria de realizar su trabajo, tan necesario", declaró el funcionario a Sputnik.
Jazairy añadió que "una de las recomendaciones radica en crear en Siria un departamento de compras bajo tutela de la ONU que dará solución rápida a los problemas a medida de su surgimiento y que tranquilizará a los bancos y compradores respecto a que sus transacciones se llevan a cabo y no violan ningún régimen de sanciones".
El relator de la ONU subrayó que este mecanismo debe tener la prerrogativa para tomar decisiones sobre excepciones a las sanciones implementadas contra Siria.
En su opinión, este departamento de Naciones Unidas debe ubicarse en Damasco y las particularidades de su funcionamiento serán debatidas en Ginebra.
Jazairy destacó que debatió esta idea con representantes de las autoridades sirias, quienes le dijeron que no tienen nada en contra de este mecanismo.
El funcionario expresó la esperanza de que la posibilidad de la creación de este mecanismo se debata durante la reunión entre los presidentes de EEUU y Rusia, Donald Trump y Vladímir Putin, que se celebrará el próximo 16 de julio en Helsinki.
"Es muy importante ver cómo implementaremos las excepciones a las sanciones contra Siria referentes a la comida, electricidad, agua y equipamiento médico necesario para salvar vidas sirias, porque de lo contrario no tendrán ni una sola oportunidad, esto es algo beneficioso para todos, porque en caso contrario ellos continuarán arribando a las costas europeas", advirtió.
Según Jazairy, la implementación y recrudecimiento de las sanciones unilaterales de varios países contra Siria empeoró considerablemente la situación de la población en el país afectado por un conflicto armado.
Casi un tercio de la población carece de provisiones suficientes, la lira siria perdió considerablemente su valor y el sistema bancario SWIFT se utiliza con fines políticos para bloquear las transferencias monetarias del país árabe.
El funcionario estimó que a la propia Europa le conviene ir reduciendo paulatinamente el régimen de sanciones contra Siria, ya que los problemas humanitarios del país obligan a la población a huir rumbo a los países de la UE.
Además, la falta de una solución a los temas humanitarios obstaculiza el retorno de los desplazados a sus hogares, alegó.
Jazairy visitó Siria entre el 13 y el 17 de mayo para valorar la incidencia de las sanciones europeas y árabes en la situación de los derechos humanos.
Sputnik
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