Según una fuente que cita la cadena, el 1 de junio la responsable de Google Cloud, Diane Greene, anunció al personal que la compañía seguirá cumpliendo sus obligaciones en el proyecto hasta marzo de 2019, pero no buscará renovar el contrato tras esta fecha.
El proyecto en cuestión bautizado Project Maven prevé el uso de inteligencia artificial para mejorar las características de los drones de combate.
El contrato con Google estaba valorado inicialmente en entre nueve y 15 millones de dólares, según los medios.
La propia empresa no ha hecho por ahora comentarios oficiales al respecto.