La compañía estadounidense SpaceX no ha logrado realizar un descenso controlado de uno de los elementos del cohete impulsor Falcon 9 durante su lanzamiento de este viernes, ha informado en su cuenta de Twitter el fundador de la compañía, Elon Musk.
El carenado del cohete impactó contra el agua a gran velocidad. La razón de esto fallo, según Musk, fue que el ala del paracaídas guiada por GPS, que tenía que proporcionar un descenso suave, no se abrió correctamente. Musk aseguró que el incidente deja claro que deben continuar con las pruebas para resolver el fallo.
Al mismo tiempo, el cohete Falcon 9, como parte de la misión Iridium-5, logró de forma exitosa poner en órbita los diez satélites que llevaba a bordo.
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