"El Consejo de Seguridad de la ONU rechazó el intento no disimulado de EEUU de aprovecharse de su mandato en intereses propios, la mayoría subrayó al necesidad de cumplir cabalmente el Plan de Acción Integral Conjunto y de renunciar a la injerencia en los asuntos internos de otros países", escribió el canciller iraní en su cuenta de Twitter.

Constató que "fue un error de cálculo más en la política externa de la administración de Trump".
El Consejo de Seguridad de la ONU celebró el 5 de enero una reunión sobre Irán por iniciativa de EEUU, cuya embajadora, Nikki Haley, afirmó que "el mundo entero vigilará de cerca" las acciones del "régimen iraní".

Las multitudinarias manifestaciones que comenzaron en Irán el 28 de diciembre y que se extendieron a las grandes ciudades iraníes, entre ellas Teherán, Mashhad, Isfahán y Rasht, se saldaron con al menos 20 muertos, según los medios.

El presidente de EEUU, Donald Trump, se refirió a las protestas iraníes y advirtió que su Gobierno estaba siguiendo de cerca la situación.

Su par de Irán, Hasán Rohani, replicó que el mandatario estadounidense no tenía derecho a opinar sobre lo que ocurría con las protestas luego de haber calificado al pueblo iraní de "terrorista".
Rohani agregó que las protestas se deben a los problemas internos del país, pero que además fueron "instigadas por otros Estados".

El comandante de los Guardianes de la Revolución Islámica, Mohamad Ali Yafarí, dio el pasado día 3 por terminadas y fracasadas las manifestaciones.

El Ministerio del Interior iraní situó el número de los participantes de las concentraciones antigubernamentales en unas 42.000 personas.

Reuters

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