Durante la presentación de su proyecto en Madrid, el primer secretario del PSC abogó por generar un clima de "grandes acuerdos" y "transversalidad" que permita alcanzar un "pacto de Estado" para un "nuevo entendimiento entre catalanes y españoles".
"Quiero una Cataluña mejor en una España diferente", resumió Iceta, cuyo proyecto de pacto de Estado pasar por el reconocimiento "explícito y al máximo nivel, aunque sin privilegios", del carácter nacional catalán y de sus aspiraciones de autogobierno.
En opinión del candidato socialista, el principal objetivo de ese pacto no será convencer al independentismo, sino convencer a una mayoría de catalanes de que España ofrece un proyecto atractivo que, además, puede poner fin a la inestabilidad política y económica creada en los últimos meses.
"Se trata alejarse de la política frentista de bandos enfrentados y hacer que nadie se sienta excluido de la política catalana; ni los que quieren que todo siga como está, ni los que quieren romper con todo", añadió.
El líder socialista apeló durante su discurso al expresidente catalán, Carles Puigdemont, al que exigió pedir perdón por embarcar a Cataluña en un proceso de ruptura que, a su modo de ver, se basó en falsos supuestos y "mentiras" como el pronóstico de un pronto reconocimiento a nivel internacional que finalmente no llegó.
Iceta también criticó la reciente propuesta de Carles Puigdemont sobre la posibilidad de habilitar una votación para que los catalanes decidan si quieren seguir perteneciendo a la Unión Europea.
"Ni queremos salir de Europa ni queremos desentendernos de ella", aseveró.
De cara a la campaña electoral, Iceta manifestó su deseo de que se puedan producir debates cara a cara entre todos los candidatos pese a que Carles Puigdemont se encuentra "de viaje de estudios" —expresión que el socialista utilizó para referirse a su huida a Bruselas— y a que el a priori candidato independentista de Esquerra Republicana de Cataluña, Oriol Junqueras, se encuentra en prisión preventiva en el marco de la causa donde el antiguo gobierno catalán es investigado por delitos de rebelión.
La mayoría de encuestas publicadas hasta el momento otorgan una ligera ventaja a la suma de fuerzas independentistas y dejan a Esquerra Republicana como el partido más votado, aunque la formación de Gobierno dependerá, en cualquier caso, de acuerdos postelectorales.
Pese a no liderar las encuestas ni siquiera entre las opciones no independentistas, Iceta mostró confianza en sus posibilidades para convertirse en el próximo presidente de Cataluña porque, a su modo de ver, el PSC es la única candidatura que puede servir de engranaje para alcanzar "acuerdos transversales".
Iceta dejó claro que el PSC no participará bajo ningún concepto en la investidura de un candidato independentista y afirmó que, aunque otros partidos contrarios al proyecto de ruptura como el de los liberales de Ciudadanos —a los que las encuestas colocan como primer partido unionista— o el Partido Popular de Mariano Rajoy queden por delante suya, él es el candidato más idóneo porque sus posiciones le permiten tender la mano para alcanzar acuerdos ante un mayor número de actores.
La presentación de la candidatura de Iceta en Madrid estuvo arropada por Pedro Sánchez, secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), que instó al Gobierno de Mariano Rajoy a cumplir su palabra y permitir un proceso de reforma constitucional que permita el encaje de propuestas como la de su partido para renovar la convivencia con Cataluña.
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