El mandatario reprochó a los legisladores actuales por ser "ignorantes" y "cortos de miras".

"No todos lo son, pero muchos", sentenció Atambáev al mencionar que Kirguistán habría podido implementar importantes proyectos estratégicos, como la construcción de un ferrocarril a China, si no fuera por la oposición del Parlamento.

"Pero estoy en contra de adelantar los comicios, deben celebrarse en los plazos previstos", afirmó al mismo tiempo.
Atambáev, quien traspasará poderes al presidente electo Sooronbái Zheenbékov el próximo día 24, se pronunció asimismo por reducir la legislatura de cinco a cuatro años y el mandato presidencial, de seis a cinco.

Después de dejar la presidencia y tomarse un respiro para combatir "fatiga crónica", Atambáev se centrará en la labor partidista en las filas socialdemócratas y se irá preparando para las siguientes elecciones legislativas.

"Podría ser cabeza de lista en las próximas elecciones parlamentarias", admitió el presidente saliente.

Las elecciones presidenciales del pasado 15 de octubre en Kirguistán terminaron con la victoria del candidato oficialista Sooronbái Zheenbékov, del Partido Socialdemócrata, que logró un 54,7% de los votos.

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