En la declaración se subraya que a pesar de las cuatro resoluciones aprobadas por el Consejo de Seguridad de la ONU sobre el conflicto de Nagorno-Karabaj entre Azerbaiyán y Armenia, el 20% del territorio internacionalmente reconocido de Azerbaiyán permanece bajo la ocupación por las fuerzas armadas armenias. Como resultado de este conflicto, más de 1 millón de azerbaiyanos fueron expulsados de sus hogares y se convirtieron en los refugiados y desplazados internos.

Se ha hecho hincapié en que mientras la comunidad internacional lucha contra todas las formas de discriminación, nazismo, antisemitismo, islamofobia y xenofobia, Armenia está emitiendo declaraciones oficiales sobre la incompatibilidad étnica de azerbaiyanos y armenios, erigiendo estatuas para el miembro de los nazis Gareguin Njeda y los miembros de la organización terrorista ASALA en su capital, ciudad de Ereván.

Se ha destacado que el discurso del ministro armenio es otro intento hipócrita de distraer a la comunidad internacional del hecho de la política de limpieza étnica llevada a cabo contra los azerbaiyanos. Las muestras del patrimonio cultural-monumentos históricos, mezquitas, museos y cementerios que demuestran que los azerbaiyanos vivieron en estos territorios hace siglos han sido destruidos intencionalmente por las fuerzas armadas armenias.

Se ha señalado que Armenia, el único estado monoétnico en una región multinacional, no tiene derecho a enseñar tolerancia a otros pueblos.

Al final, se ha afirmado que en los últimos años, las declaraciones de los funcionarios armenios están llenas de odio y acusaciones falsas. En lugar de crear paz en las mentes de las personas, Armenia está tratando de alterar los valores dentro de una organización respetable como la UNESCO. Pero estamos seguros de que sus intentos fracasarán.

Sevda Bakirova

Etiquetas: #Azerbaiyan   #Armenia   #UNESCO