"Era algo previsible; las posiciones de los separatistas se fortalecieron sin lugar a dudas tras el referéndum, pero no hasta el punto de poder contar con la benevolencia de los vecinos de la UE (…) y si Madrid no repite los errores de los últimos años y especialmente meses, existe una oportunidad para mantener la integridad territorial de España", señaló, luego de que Carles Puigdemont se abstuviese de aplicar la declaración de independencia de Cataluña.

Según el senador, el futuro de Cataluña dependería de la benevolencia de la UE en primera instancia y expresó su confianza en que primen las posturas abiertas al diálogo.

"Si el Parlamento escucha el llamado del jefe del Gobierno, tenemos por delante la posibilidad real de un diálogo con Madrid", indicó.

Sin embargo, señaló que "hasta el momento las autoridades españolas no habían aceptado el diálogo".
El presidente del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, propuso el 10 de octubre que el Parlamento suspendiese los efectos de la declaración de independencia, evitando de tal modo la llamada Declaración Unilateral de Independencia.

Puigdemont reconoció que tras las últimas semanas el camino a seguir es la mediación y el diálogo con el Gobierno español.

El 1 de octubre tuvo lugar un referéndum de autodeterminación convocado unilateralmente por el Gobierno catalán, una consulta que el Tribunal Constitucional había declarado previamente ilegal y que los cuerpos de seguridad españoles trataron de impedir.

Pese al despliegue policial contra la votación, un total de 2,3 millones de catalanes participaron en la consulta.

De estos 2,3 millones de votantes, que representan un 43% del censo total con derecho a voto, un 90% se mostró favorable a la opción independentista.

La respuesta desde Madrid fue tajante a la hora de negar la validez e incluso la propia existencia del referéndum por contrariar la legalidad.Sputnik

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